viernes, 27 de abril de 2012

¡Plástico CERO ya!



Este es un vídeo desesperanzador, una isla en el Pacífico sin personas, sólo animales, principalmente pájaros, pájaros que mueren por comer lo que ellos suponen que son peces, pero que realmente son plásticos: mecheros, cepillos de dientes, tapones de botellas, piezas de lego, y un largo etcétera...

Cuando veo estas cosas no dejo de querer gritar al mundo que nos hemos vuelto locos, que no podemos hacer esto con nuestra casa, la estamos convirtiendo en un enorme basurero.

Alguno de esos tapones de brick o botella a lo mejor lo he desechado yo, me siento responsable, en parte, de la muerte de esos pájaros, y estoy resuelta a cambiarlo.

La única manera de cambiarlo es "consumo cero" de envases: las bebidas gaseosas y latas están prácticamente controladas, pero ¿Y los bricks? ¿Cómo, tras tantos años de bonanza, podemos renunciar a la leche? La LECHE!! 
Yo ya hice un experimento de reducción de envases cuando hice la "Semana No Impact", compramos una máquina de hacer leche vegetal (no consumimos leche de vaca, aunque en ese momento había en una gasolinera cercana una máquina expendedora de leche y podías llevarte tus botellas de vidrio reutilizables. Poca gente compraba esa leche, ¿mucho engorro? y pronto quitaron la máquina), pero dos años después de aquello la máquina de hacer leche vegetal está estropeada y hemos vuelto a los bricks. 
Estos bricks los guardamos, vamos a construir una cabaña para los niños, ¡Qué buena idea! PERO, dentro de un año o dos, esos bricks terminarán igual, en la basura, con dos usos en vez de uno, cierto, pero sigue sin valerme!!

La única solución viable es NO COMPRARLOS, y no hay otra. 
Estoy segura que tiene que haber recetas de leches vegetales de almendra, soja, avena, sésamo, etc... y sin necesidad de máquinas, a ver si las busco y os las paso!!

Tengo una amiga que dice que el rollo que tenemos con la leche es algo educacional, es una costumbre, algo a lo que nos hemos acostumbrado y nos parece que no podemos vivir sin ello, pero hay alternativas: zumos, infusiones, cambiar el chip...

No sé muy bien cómo terminará toda esta crisis medio ambiental, pero necesitamos un cambio radical YA, yo lo estoy intentando y con que este post concienciara a una sola persona más, me daría por contenta.


jueves, 26 de abril de 2012

El huerto en un pinar


Os voy a contar porqué he terminado poniendo un invernadero en el jardín de mi casa.
Vivo en una casa individual, con una parcela de 800m2 (odio cuando no soy capaz de poner el superíndice!), tiene un enorme pino a suroeste. Es un pino bastante bonito, pero su porte es demasiado grande para una parcela tan pequeña. El pino está bien en verano, debajo de él hay sombra perpetua. Lo malo es en invierno, y aquí, en la sierra norte de Madrid os aseguro que el invierno es bastante más largo que el verano, el pino nos hace sombra a la casa a partir de mediodía... Yo creo que sería mucho, mucho mejor tener un árbol de hoja caduca que da sombra en verano y deja pasar el poquito sol de invierno que es tan agradable.
Por todo esto, y también porque el suelo está acidificado con tanta pinocha, decidimos que, aunque nos daba pena, lo mejor sería cortar el pino, utilizar la madera como leña (ahora tenemos que comprar mucha leña de "no se sabe dónde" para calentar la casa que el pino sombrea) y parte para un amigo carpintero, y plantar un árbol más adecuado a nuestras necesidades.
Solicitamos un permiso, pero debido a la Ley de protección del arbolado urbano, nos denegaron el permiso. Mi primer arranque de desilusión me llevó a querer vender la casa, pero mirando otras casas me di cuenta que la mía es estupenda, y ya llevamos muchos años arreglándola a nuestro gusto, ¡Qué pereza empezar de nuevo!
Como siempre hay una luz al final del camino (nunca mejor dicho), se me ocurrió una "feliz idea", aunque todavía no sé qué resultados obtendré de todo esto, pero de momento la experimentación me resulta muy interesante.
La idea fue poner un invernadero, no para una utilización "normal" del mismo, sino para paliar las "deficiencias" de mi jardín en concreto.
El invernadero, según mis cálculos suplirá:
1.- La falta de calor
2.- La falta de luz
3.- La acidificación del suelo
Hemos comprado tierra vegetal con mantillo, por lo que en invernadero tiene tierra nueva, y otra de las acciones que emprenderemos será podar el pino en su parte baja (que es dónde tiene las ramas más largas) para que deje pasar más luz.
En estos días hemos montado el invernadero, algún día que ha parado el viento y la lluvia/granizo. Nos faltan las puertas, pero ya hemos empezado a sembrar... Pero ese capítulo lo dejo para el siguiente post.
En breve os seguiré contando cómo evoluciona mi huerto-pinar, de momento, da mucho gusto entrar en el invernadero y quitarse el abrigo, es como entrar en una cápsula del tiempo, ¡Estoy más contenta!

domingo, 8 de abril de 2012

Cómo preparar un terreno para hacer un huerto ecológico






Lo primero, hacer un diseño con las zonas que se van a trabajar y los caminos de acceso para no trabajar en balde.  Es importante porque las zonas de siembra no deben volverse a pisar (para no apelmazar). Los accesos no hace falta trabajarlos.

Según como esté el terreno:
  • Si el terreno está bien estructurado, basta con aflojarlo cuando esté un poco húmedo, con una horca de doble mango, o si no tienes, con una horca normal.  Se clava en vertical y se hace el gesto de levantar el terreno, un poco.  No se trata de levantar la tierra, sino simplemente de airear y de que el agua de la lluvia o el riego pueda entrar en profundidad.  De ese modo, las "bajas" de lombrices, bacterias, microrrizas, etc. son las minimas.
  • También puede hacerse un huerto de acolchado o huerto lasaña directamente en el suelo, sin cavar, poniendo capas de periodicos o cartón mojado (la tinta no tiene problema, pues procede de la soja), estiercol, paja, materia verde (hierbas sin semillas, restos de poda, restos de cocina), paja, estiércol, paja, materia verde, paja ... remojando cada capa. El estiércol puede ser de caballo o de gallina, o puede también utilizarse "peat moss"  (la paja del gallinero o el establo). Última capa se pone compost y se siembra/planta.  En realidad es un huerto establecido en un compost de superficie, muy aireado, que estimula la vida bacteriana y que atrae a las lombrices.  Si en el huerto hay "hierbas no invitadas", antes del papel/cartón se pone directamente el estiércol, que quemará las hierbas. Las plantas leñosas sí hay que arrancarlas..
  • Si la tierra está muy apelmazada y muerta, entonces no pasa nada por aflojar con la azada, o si es grande pasar el motocultor, ya que no hay nada importante que se pueda dañar. A partir de ahí, se hace el diseño y las zonas que se van a sembrar/plantar no se vuelven a pisar.  En ese caso es mejor comenzar con un huerto de acolchado, para añadir mucha materia orgánica de entrada, que enseguida estimulará la vida.

¡Mil gracias Isabel por esta info tan importante para comenzar con nuestros huertos!

lunes, 2 de abril de 2012

Cómo hacer un buen compost



Os recomiendo este maravilloso libro que habla sobre un tema tan, tan importante como la regeneración del suelo a través de la "fabricación" de un buen compost.
Su autor, Mariano Bueno, es un gran agricultor ecológico y gran difusor de estos importantes conocimientos.
He aquí un fragmento que resume su importancia:

"Aunque a nuestro alrededor observamos cotidianamente los procesos de degradación de la materia orgánica y su constante transformación, en general no somos conscientes del importante papel que desempeña en los procesos de desarrollo de las plantas silvestres o de las cultivadas, e incluso de lo trascendente que resulta para el resto de seres vivos, incluida la supervivencia de nuestra propia especie.
En la sociedad contemporánea estamos cometiendo errores que ponen en riesgo la continuidad de ese proceso de retroalimentación y de incremento constante de la fertilidad de la tierra. La mayor parte de la materia orgánica convertida en alimentos, es consumida a muchos kilómetros del lugar donde se produjo, y los restos orgánicos desechados tras su consumo no vuelven a integrarse en el ciclo vital, sino que terminan enterrados o incinerados en vertederos, o eliminados a través del alcantarillado, mientras las tierras de cultivo sufren una progresiva pérdida de fertilidad y preocupantes procesos de erosión. 
Afortunadamente, existen alternativas a este irracional proceso despilfarrador de recursos que degrada la Naturaleza. Una de las opciones más eficaces a corto y largo plazo pasa precisamente por la correcta gestión y el adecuado compostaje de la materia orgánica y de todos los restos orgánicos disponibles."

Este libro me lleva al mismo punto en el que incide Darren Doherty, de alguna manera hay que parar la desertización del suelo, invirtiendo el proceso y conseguir regenerarlo. ¡Es tan importante!